Principal puerto invierte US$1.000 millones en ampliación de terminal
“Nos encontramos en un periodo en el que las cadenas de suministro se dispersarán progresivamente. Especialmente en Asia, donde es probable que se reduzca gradualmente la dependencia de China como lugar de fabricación y, en su lugar, se produzca un mayor aprovisionamiento en una parte más amplia de la región”, comenta el analista Lars Jensen en LinkedIn, en referencia a la inversión de US$1.000 millones en el puerto autónomo de Sihanoukville en el reino de Camboya –que se yergue como una alternativa frente a la pérdida de protagonismo de los proveedores en China– para un proyecto de ampliación en tres fases hasta 2029 para permitir que buques más grandes hagan escala en el país.
El proyecto de ampliación busca que portacontenedores de mayor capacidad recalen en el puerto, apuntando a triplicar su capacidad de manipulación de carga, pasando de 700.000 TEU anuales a 1,4 millones en 2026 y 2,6 millones en 2029, según reportes de prensa internacional.
La importancia de la infraestructura
Jensen, que además de analista es CEO y fundador de la consultora estratégica de shipping de contenedores Vespucci Maritime, recalca la importancia del desarrollo de infraestructura adecuada para satisfacer las necesidades de atención de las naves del futuro. “Para las empresas que deseen cambiar sus pautas de aprovisionamiento, es importante el acceso a buenas instalaciones portuarias de contenedores, ya que es la clave para servicios más frecuentes operados por buques más rentables. Es probable que los proyectos de mejora/ampliación de puertos como el que figura aumenten bastante en el futuro para las regiones que pretendan aprovechar el potencial de crecimiento de las pautas de aprovisionamiento más dispersas”, destaca, en referencia al proyecto en Sihanoukville.
Y es que la ampliación de la terminal de contenedores de Sihanoukville, que obtuvo ganancias por US$86 millones en 2022, consiste en tres fases, la primera de las cuales incluye el aumento del calado actual de 9,2 metros –que previene que reciba el 82% de los portacontenedores—a 14,5 metros, además de la construcción de una terminal de contenedores de 350 metros de eslora. La nueva infraestructura, que contará en su primera fase con una inversión de US$275 millones, estaría terminada en 2026 y permitirá la escala de buques de hasta 4.000 TEUs.
La segunda fase consistirá en la construcción de una terminal de 400 metros de longitud y calado de 16,5 metros de profundidad, a iniciar en 2025 hasta 2028, mientras que la tercera fase comenzará en 2026 y finalizará en 2029, y costará unos US$700 millones. Además, dentro de las obras, el puerto contará con la modernización y automatización de los equipos.
Capital nipón
Japón ha concedido un préstamo en condiciones favorables de US$760 millones para el proyecto, y el resto correrá a cargo de la capital de Camboya, Phnom Penh. Los representantes del gobierno nipón en Camboya declararon que su gobierno seguiría ayudando al desarrollo del puerto, lo que podría implicar convertirlo en un puerto franco con enlaces de transporte a una zona económica especial.
Sin embargo, a pesar de la ingente inversión, Sihanoukville sigue siendo un puerto pequeño en comparación con la región. La capacidad de Singapur es de 37 millones de TEU, y Tailandia, Malasia e Indonesia tienen puertos de más de 7 millones. Pero pondrá a Camboya en el mapa del transporte marítimo, consolidando su paso de puerto alimentador a un hub portuario de relevancia dentro de la región.
Además de la ampliación de Sihanoukville, Camboya está construyendo un puerto y centro logístico de US$1.500 millones en el suroeste del país. Este proyecto de 600 hectáreas en la provincia de Kampot corre a cargo de una empresa conjunta del Shanghai Construction Group y la China Road and Bridge Corporation.