Además, la gestión de capacidad de las líneas navieras en la principal ruta Transpacífico han más que duplicado las tarifas.
Después de completarse un año con las tarifas de flete marítimo a largo plazo en caída libre, los últimos datos de Xeneta sugieren que la industria finalmente puede haber llegado a un punto de inflexión. Según el Xeneta Shipping Index (XSI), que monitorea la evolución de las tarifas en tiempo real mensualmente, en septiembre registró un aumento del 0,2% en este tipo de tarifas a nivel mundial.
Gestión de capacidad, factor clave
“Es demasiado pronto para decir si se trata de un cambio fundamental y duradero”, comenta Peter Sand, analista jefe de Xeneta. “Pero, a pesar de la muy pequeña escala de la ganancia, es un avance significativo después de un período tan prolongado de declive. Las razones detrás de esto son complejas, pero una campaña de gestión coordinada de la capacidad por parte de las líneas navieras (restringiendo la capacidad en las rutas más grande”, añade.
“En las últimas semanas y meses, ya hemos visto que las tarifas spot se movían por encima de las tarifas de largo plazo en rutas clave, lo que sugiere que las tarifas de largo plazo eventualmente seguirían el mismo camino y comenzarían a subir. Todavía es muy difícil predecir este mercado dinámico, especialmente teniendo en cuenta el exceso de capacidad rampante, pero, si los operadores pueden continuar con su gestión unida y proactiva de la capacidad, este primer aumento probablemente no será el último. Los expedidores que ahora tienen la flexibilidad de negociar nuevos contratos a largo plazo deberían tener esto en cuenta”.
Optimismo, pero con cautela
Sand señala que se han ido acumulando pruebas de un cambio venidero. Al desplome mensual del 27,5% en mayo en el XSI global fue seguido por caídas del 9,4% y 9,5% en junio y julio, disminuyendo al 7,8% en agosto. Al mismo tiempo, las tarifas spot en la principal ruta Transpacífico se han más que duplicado este trimestre, en gran parte debido a la ya mencionada estricta gestión de capacidad.
No obstante, afirma Sand, “las buenas noticias para las líneas navieras se verán atenuadas por el hecho de que las tarifas siguen siendo muy bajas. De hecho, el XSI global ha bajado un 16,5% intertrimestral y esto se reflejará en los resultados de la industria para el periodo, especialmente en lo que respecta a aquellos operadores más expuestas al mercado de largo plazo. Entonces, sí, hay motivos para un optimismo cauteloso aquí, pero difícilmente diría que la industria está fuera de peligro por el momento”.
Este punto queda ilustrado por el desglose regional de la evolución del mercado del XSI, con subíndices regionales que exhiben cifras rojas como azules.
Principales regiones
El índice de exportaciones de Extremo Oriente, fundamental a la hora de calcular el XSI Global, puso fin a 13 meses consecutivos de caídas con una ganancia mensual del 1,4%. Sin embargo, al igual que en Europa (y por la misma razón), el subíndice de backhaul (importaciones) registró una pérdida comparable, cayendo un 1,5%. Este punto de referencia se encuentra ahora en su nivel más bajo desde enero de 2021.
Repunte de la demanda en Estados Unidos
En Estados Unidos, tanto los índices de referencia de importación como de exportación cayeron, el primero un 2,3% y el segundo un 0,9%. Estos han experimentado ahora caídas interanuales respectivas del 65,6% y el 11,9%. Sin embargo, a pesar de las continuas caídas a largo plazo, Sand enfatiza que las tarifas spot han respondido tanto a la reducción de capacidad de las líneas navieras como a un repunte de la demanda, y los últimos datos disponibles muestran que los volúmenes desde el Lejano Oriente hasta la costa oeste de EE.UU. aumentaron por encima de los 900.000 TEUs por primera vez este año en julio. Sin embargo, este nivel sigue siendo un 8,5% inferior en la comparativa interanual.
En Europa, el subíndice de importaciones europeas mostró un aumento del 1,8% respecto a agosto (un 59,3% menos interanual), con la cifra de exportaciones en dirección opuesta y cayendo un 2,2% en el mes, alcanzando su nivel más bajo desde octubre de 2021. La disparidad probablemente pueda explicarse, explica Sand, por la estrategia de las líneas navieras de centrarse en rutas de importación de gran volumen, protegiendo estas tarifas clave al trasladar capacidad a rutas de menor volumen. “Es una táctica eficaz cuando se trata de mejorar la rentabilidad”, comenta.
“Teniendo en cuenta los acontecimientos actuales, es imperativo que todas las partes que inician negociaciones contractuales vigilen de cerca los datos en tiempo real”, concluye Sand. “El tiempo lo es todo a la hora de conseguir las mejores ofertas en un mercado en movimiento. Si las decisiones se retrasan y el crecimiento de las tarifas cobra impulso, habrá un precio claro que pagar durante la duración de estos nuevos contratos”.