Las semillas de incertidumbre que amenazan la recuperación de la economía global

Nuevas oleadas de Covid-19 causadas por distintas variantes y nivel de la deuda global asoman en el horizonte

Mientras muchas partes del mundo se recuperan de lo peor de la pandemia de Coronavirus, resulta importante preguntarse ¿cuáles son las perspectivas económicas que tenemos por delante?

El Banco Mundial acaba de publicar el número de junio de su informe bianual Global Perspectivas Económicas Mundiales, el cual, según el reporte semanal de Alphabulk, puede resumirse en el primer párrafo de su prólogo: “Tras el colapso del año pasado, la economía mundial está experimentando una recuperación excepcionalmente fuerte pero desigual. Mientras que las economías avanzadas están repuntando, muchos de los países más pobres del mundo se están quedando atrás, y aún queda mucho por hacer para revertir los de la pandemia”.

Además, la recuperación no está asegurada: sigue existiendo la posibilidad de que nuevas oleadas de Covid-19, que se produzcan nuevos retrasos en la vacunación y el aumento de la deuda o las presiones inflacionistas retrocesos”.

El Banco Mundial ha revisado su previsión de crecimiento para 2021, pasando del 4,5% en enero de enero de 2021 a una tasa de recuperación muy fuerte -de hecho, la más fuerte de los últimos 80 años- del 5,6% del PIB mundial, sorprendente cifra que es calificada por el Banco Mundial como “desigual”.

El crecimiento del PIB en 2021 para una serie de países seleccionados, junto con el crecimiento del PIB estimado para esos mismos países en 2020, muestra en efecto, una recuperación “desigual”, incluso azarosa, con tasas que van desde algo menos del 2% hasta más del 8%.

Y aunque la recuperación es fuerte y desigual, lo cual es bastante novedoso, el siguiente punto mencionado en el primer párrafo del prólogo del informe es demasiado familiar: “los países más pobres del mundo se están quedando atrás”. Por desgracia, esto ha sido así durante muchos años.

Bloqueos en el camino

El informe del Banco Mundial advierte de dos posibles bloqueos a la recuperación: el primero está relacionado con Covid, mientras que el segundo está relacionado con cuestiones financieras, vinculadas a la forma en que los políticos han tratado la crisis de Covid.

El Banco advierte sobre “olas adicionales de Covid-19 y nuevos retrasos en la vacunación” que podrían retrasar la recuperación. Por supuesto, las oleadas no son oleadas del mismo virus, sino en realidad diferentes epidemias causadas por distintas variantes del virus original. Por ejemplo. Francia comenzó su campaña de vacunación tarde, el 27 de diciembre de 2020, momento en el que el número diario de muertes relacionadas con Covid ya había disminuido drásticamente desde un peak de unas 600 muertes (media móvil de 7 días) a mediados de noviembre, a 300 muertes (media móvil de 7 días) a fines de diciembre de 2020. Por lo tanto, este descenso no puede atribuirse a la campaña de vacunación.

Las olas múltiples parecen ser la naturaleza de la epidemia, por lo tanto, más oleadas son una clara posibilidad, especialmente al ver los partidos de fútbol de la Eurocopa 2020 jugados en estadios llenos de 60.000 espectadores.

En cuanto a los comentarios del Banco Mundial sobre “más retrasos en la vacunación”, desde Alphabulk plantean que nadie puede decir ahora que las vacunas desarrolladas no están funcionando, pero tampoco nadie puede decir que están funcionando, por una buena razón: acaban de empezar sus ensayos clínicos. Estos ensayos involucran a miles de millones de personas, pero no dejan de ser ensayos. Sólo después de varios años se podrá decir que estas nuevas vacunas funcionan y son inofensivas.

En abril de 2020, el NY Times publicó un artículo sobre el camino normal para que una vacuna salga al mercado con éxito: 13 años entre el inicio de la investigación académica y el despliegue exitoso en la población, o en un calendario acelerado 9 años. Las vacunas Pzifer, Moderna y Astrazeneca fueron desarrolladas desde cero y desplegadas en la población en menos de 12 meses. Así que, sí, el fracaso de las vacunas, ya sea en su despliegue y/o en su eficacia, podría hacer descarrilar la recuperación.

El fantasma de la deuda

Por último, plantea el reporte de Alphabulk un punto en el que todos podrían estar de acuerdo, se refiere a la forma en que los políticos han manejado la epidemia de Covid, la que ha conducido a una cantidad monstruosa de deuda, añadida a un stock de deuda existente ya alarmante.

Un estudio reciente realizado por el Instituto de Finanzas Internacionales (IFF) concluyó que la epidemia de Covid ha añadido US$24 billones a la montaña de deuda mundial durante el último año, elevándola a un récord de US$281 billones.

La correspondiente relación entre la deuda total y el PIB en todo el mundo se sitúa ahora en un nivel similar al de Japón: ¡más del 355%! Este nivel en sí mismo no hará descarrilar la recuperación a corto plazo, pero sin duda sembrará las semillas de una gran incertidumbre a medio y largo plazo.

Fuente: https://www.mundomaritimo.cl/noticias/las-semillas-de-incertidumbre-que-amenazan-la-recuperacion-de-la-economia-global