
México y Canadá quedaron exentos de los nuevos aranceles recíprocos del 10% impuestos por Estados Unidos, lo que otorga al país una ventaja comercial.
Las implicaciones económicas de los aranceles impuestos por Estados Unidos a más de 60 países o bloques comerciales son significativas. Estos nuevos gravámenes incidirán directamente en las cadenas de suministro globales, encareciendo los productos y afectando al bolsillo de los consumidores en distintas regiones del mundo.
Los aranceles, aplicados principalmente en las primeras fases de producción, tienen un impacto directo en el precio final de los bienes. De acuerdo con estimaciones económicas, un aumento de 10 puntos porcentuales en los aranceles puede traducirse en un incremento de hasta 4 puntos en los precios que paga el consumidor. Este efecto multiplicador puede derivar en presiones inflacionarias.
Aunque el presidente Donald Trump anunció una pausa de 90 días en la aplicación de los llamados “aranceles recíprocos” —cuyo porcentaje varía según el país—, se mantuvo un arancel mínimo de 10% para la mayoría de las importaciones. Entre las excepciones figuran los teléfonos inteligentes, computadoras, semiconductores, células solares y tarjetas de memoria.
Durante los próximos tres meses, Estados Unidos pretende renegociar las tasas, que van desde el 10% hasta el 47% dependiendo del origen de la importación. Un ejemplo de esta disparidad es Vietnam, que originalmente enfrentaba un arancel del 46% y ahora, temporalmente, se le aplicará solo el mínimo del 10%.
En este contexto, dos países quedaron exentos de los nuevos aranceles recíprocos: México y Canadá. “Desde Washington: me informan oficialmente no estamos incluidos en los aranceles recíprocos de 10% anunciados el día de hoy”, afirmó el secretario mexicano de Economía, Marcelo Ebrard, a través de su cuenta de X.
Se mantiene, no obstante, un arancel del 25% a productos mexicanos y canadienses no amparados por el tratado comercial T-MEC, como el acero y el aluminio. Sin embargo, el acuerdo firmado por Trump en su mandato anterior cubre una parte sustancial de las exportaciones mexicanas.
“México se encuentra en mejor situación que otros países, como los asiáticos, en cuanto a aranceles efectivos, ya que estas naciones son las más afectadas por los nuevos porcentajes de gravámenes”, señaló el Departamento de Investigación Económica de Banamex.
Economías asiáticas como Indonesia, Vietnam o China, competidoras directas de México en manufactura con bajos costos laborales, enfrentan mayores obstáculos para acceder al mercado estadounidense. Los analistas de Banamex consideran que, aunque los aranceles reducen la competitividad frente a productores estadounidenses, la exclusión de México de esta lista le otorga“mayor competitividad frente al resto del mundo” y lo deja “mejor posicionado”.
Para Devan Kaloo, responsable de inversiones en bolsa de Aberdeen Investments, el hecho de que México quede fuera del nuevo arancel universal le permite conservar ventajas clave en el comercio internacional. “El mercado laboral estadounidense no podrá fabricar los productos de gama baja que sustituyan a los productos chinos en las cadenas de suministros”, afirmó. Según su análisis, muchas empresas estadounidenses buscarán alternativas cercanas, como México.
“La población mexicana es muy numerosa, 133 millones de personas, y los salarios del sector manufacturero son comparables a los de China, y probablemente más baratos si se tienen en cuenta los aranceles”, explicó Kaloo. “Por eso, México resulta atractivo para las industrias que requieren mucha mano de obra y poca cualificación, pero también para aquellas en las que existe una mayor preocupación por la seguridad nacional”, añadió.
Joaquín Barrera Alonso, director de renta fija e inversiones de Sura Investment en Ciudad de México, destacó otra ventaja competitiva: “Un empleado que trabaja en el rubro de manufacturas gana hasta cuatro veces menos que el mismo empleado en el mismo sector haciendo la misma tarea en Estados Unidos”, señaló.

La proximidad geográfica también es un factor determinante. “Aunque Trump obviamente está tratando de que más empresas vayan y se establezcan en Estados Unidos, la realidad es que ya hay unas que están muy bien establecidas en México, que difícilmente van a desconectarse para irse para allá”, sostuvo Barrera Alonso.
Esto es particularmente relevante para productos perecederos. La gran mayoría de las importaciones estadounidenses de alimentos frescos, como verduras, provienen de México y Canadá. Estos productos quedaron fuera de la nueva ronda de aranceles. Según Kaloo, “la integración de EE.UU. con México aumentó” desde la pandemia, y existen “fuertes vínculos industriales ya consolidados”.
El conocimiento que tienen las empresas mexicanas sobre la normativa estadounidense es otro punto a favor. “El país es grande, con potencial para ampliar la capacidad industrial, y el gobierno está acostumbrado a apoyar la inversión estadounidense mediante exenciones fiscales y otros planes”, expuso Kaloo.
Sin embargo, los efectos a largo plazo de esta política arancelaria aún son inciertos. Arantza Alonso Berbotto, analista sénior de Verisk Maplecroft, señaló que “aunque a México no le afectó de la misma manera que a otros países y existe una ventaja marginal porque queda un poco mejor parado, creo que difícilmente va a traer inversiones significativas a corto plazo o va a generar crecimiento sostenido”.
Recordó también que “el arancel de México debería ser cero, debido a que estamos en un tratado de libre de comercio con Estados Unidos y Canadá, y en este momento no lo es. Es algo que hay que tomar en cuenta. Las importaciones mexicanas tienen un arancel menor al promedio, pero no significa que no tenga”.
“Por los datos vemos que podríamos entrar en una recesión. Sin duda, las exportaciones, los aranceles, han bajado todos los pronósticos de crecimiento del país. Sigue dominando la incertidumbre y existen muchas dudas sobre qué va a pasar con el T-MEC”, concluyó Alonso Berbotto, en alusión al tratado comercial cuya revisión está programada para 2026, pero cuyas negociaciones preliminares podrían iniciarse este año.
Mientras tanto, México y Canadá han esquivado el aumento generalizado de aranceles. Aún no se sabe cuánto durarán estas medidas, ni qué países lograrán mejorar sus condiciones de acceso al mercado estadounidense. La industria mexicana enfrenta ahora un escenario lleno de incertidumbre, mientras el gobierno busca enviar señales de cooperación al nuevo mandato de Trump, según la BBC.