Consultora de la compañía aboga por la generación de sinergias entre empresa y sus trabajadores
HPC Hamburg Port Consulting GmbH es una empresa consultora con más de 40 años de experiencia en el mercado que ha desarrollado más de 1.700 proyectos en más de 130 países. Su principal valor se basa en que también conocen de primera mano las operaciones portuarias y ferroviarias, gracias a su empresa matriz, Hamburger Hafen und Logistik. “Tenemos cinco terminales en el puerto de Hamburgo y dos terminales internacionales y, además, a través de nuestro ferrocarril contamos 17 operaciones intermodales en el hinterland de Europa”, describe Bárbara Allendes, consultora de Puertos y subgerente de Desarrollo de Negocios para Latinoamérica y El Caribe de la compañía.
La amplia red de consultores de HPC, le permite a través de sus representantes regionales entender la idiosincrasia o cuáles son las necesidades que tiene cada área geográfica en las que tiene presencia. Aspecto que resulta clave para el despliegue de sus consultorías en una industria que en nuestra región enfrenta procesos de modernización a través de la incorporación de tecnologías.
HPC ha brindado asesorías tecnológicas a diversas terminales portuarias en el mundo y hoy en la región de LATAM y el Caribe se ha ampliado el espectro de servicios mediante la aplicación de Terminal Excellence Check que “viene a evaluar un terminal o puerto en 360 grados”, apunta Allendes. De esta manera, la compañía puede aportar en la estandarización de procesos operacionales, mediante una asesoría que involucra un análisis que busca optimizarlos mediante la aplicación de la automatización y la digitalización. A su vez, plantea la conformación de equipos humanos adecuados y análisis de oportunidades de mercado para que el operador pueda cumplir con los estándares deseados y trazar su hoja de ruta estratégica considerando frentes como la competitividad, seguridad, medioambiente, optimización operacional y mantenimiento.
Pero evidentemente el camino para esta transformación no es llano y un aspecto clave a considerar es el factor humano. “el fondo del desafío no es si tenemos o no soluciones de digitalización o de automatización, sino cómo resolvemos la adopción de tecnologías y optimizaciones con los trabajadores portuarios; debemos articular la gestión del cambio para estandarizar la calidad del trabajo”.
Para superar esta problemática, Allendes considera que es clave la generación de sinergias entre empresa y trabajadores. “Hay un tema con la gestión del cambio que debe ser trabajada de forma progresiva. Estas transformaciones pueden tomar años y es necesario entender cómo pueden ser articuladas y eso implica comprender el carácter de los integrantes de la empresa, estructuras sindicales y las expectativas de los trabajadores”, formula.
Explica que en la medida en que la gente entra en cierta dinámica con la adopción de las mejoras, y entiende el panorama de competitividad que se debe generar para mantener al terminal operando eficientemente y colabora con la optimización de los procesos, se desarrolla una nueva cultura dentro de la organización, que luego permitirá incorporar paulatinamente nuevas capacidades al equipo.
Beneficios de la transformación
Según Allendes, los beneficios de llevar adelante procesos de este tipo en un terminal portuario van desde un mayor grado de competitividad, hasta aspectos como el orgullo de los trabajadores de pertenecer a una organización que se preocupa por el desarrollo de su carrera, por su seguridad, que posee altos estándares de servicio y que presenta áreas de trabajo limpias y ordenadas. “Pertenecer a una empresa que funciona muy bien, también hace sentir mejor al trabajador”, apunta.
Los clientes de los terminales portuarios que cumplan estos procesos de optimización también resultan beneficiados y si bien, los resultados no se observarán de inmediato, una vez que se logra avanzar en la hoja de ruta, se podrán apreciar en la calidad del servicio. Allendes, en este sentido, destaca que se podrá obtener más información sobre lo que está pasando con la trazabilidad de la carga. “Se logran beneficios gracias a la integración de la información y se obtienen mejores coordinaciones como saber a qué hora llega la carga, por qué medio (barcaza, camión, ferrocarril), tonelajes, características de la misma y las siguientes etapas de la operación. En el fondo se conoce mejor la traza del proceso. Mientras un terminal es más productivo, la comunidad también se beneficia, por ejemplo, con menores emisiones de CO2”, indica.
Bárbara Allendes enfatiza que finalmente estas transformaciones se tratan de un trabajo en equipo, pero esto no se limita a una terminal determinada. “Sé que muchos puertos de la región están avanzando en estos objetivos, creo que hoy tenemos que tender a la colaboración pensando en la competitividad de las diferentes regiones y que sería bueno desarrollar algún trabajo en conjunto. En Chile, por ejemplo, no descarto la promoción de sinergias entre nuestros puertos y con los países vecinos. Si hoy destaco un tema, es cómo nos colaboramos”.