Una encuesta de la cámara exportadora revela que hacen falta incentivar inversiones. Comparado con 2023, el 47% cree que va a cerrar el año con un incremento de ventas al exterior.
Aunque el Gobierno asegura que está en la senda correcta para liberar el cepo al dólar, la realidad es que pareciera que la mayoría de las empresas exportadoras “no la ven”. Según revela una encuesta de la Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA), siete de cada 10 empresas del sector considera que este no es un buen momento para invertir.
“Transcurridos los primeros meses de la nueva administración y teniendo en cuenta las normativas a la vista, el 69% de los exportadores considera que no tiene incentivos suficientes para aumentar inversión, empleo y exportación”, indica el reporte.
La explicación de ello se vincula con el cepo al dólar, que plantea problemas para el financiamiento y para el pago de insumos al exterior.
El reporte dice que “los factores regulatorios locales que más perjudican” la actividad exportadora son, en primer lugar, “las dificultades para realizar pagos al exterior”; la falta de recupero impositivo; los “tipos de cambio múltiples”; las obligaciones relacionadas con la “liquidación de divisas” y las restricciones sobre los “pagos de fletes”.
Al respecto, el informe de CERA indica que, “en los sectores que pagan derechos de exportación, esto se incluyó como tema crítico”.
A pesar de ello, las empresas esperan una mejora. “Para 2024, el 47% de los encuestados prevé un aumento en sus exportaciones comparado con 2023, el 31% espera una caída y el 22% cree que no habrá cambios”, dice el reporte.
Entre los sectores más aparecen la minería y petróleo & gas, y varios sectores agroindustriales prevén una recuperación luego de la sequía de 2023. En contraste, los sectores menos optimistas para este año son automotriz y bienes industriales.
De hecho, también siete de cada 10 empresas tiene la expectativa de que los factores que considera más relevantes “tendrán inicio de solución en los próximos 12 meses”.
Los encuestados afirmaron que, para que sus exportaciones aumenten de manera significativa, por encima del 30%, los principales factores domésticos que deberían ser abordados son, además de los anteriores (51%): la reducción de la carga impositiva (14%), la ampliación del acceso al financiamiento (9%), el valor del tipo de cambio (5%), el fortalecimiento del relacionamiento externo (5%), la mejora del sistema logístico (5%), una mayor institucionalidad (4%), el avance en procesos de facilitación del comercio (4%) y las mejoras en la promoción comercial (3%).