Condiciones de precios, incertidumbre sobre combustibles y entorno operativo no variarían este año
El año pasado, los precios de los tanqueros nuevos se dispararon entre un 15 y un 20% dependiendo del astillero contratado y el tipo de buque. Este año, todas las señales apuntan a nuevos incrementos. Esta suposición se deriva del repunte de la economía mundial, aunque se espera que el conflicto de Ucrania reduzca el crecimiento mundial en aproximadamente un 0,5% este año, aunque con escaso impacto sobre la economía mundial. El fenómeno de inflación sí es una amenaza real que seguirá elevando los precios de las materias primas. De hecho, se espera que los precios del acero continúen fortaleciéndose este año (en 2021 aumentaron casi un 90% en promedio anual). Además, los aumentos generales del costo de la vida mantendrán la presión alcista sobre los salarios en los astilleros, señala el reporte de marzo de BRS Tanker.
Para la consultora es importante considerar también que el cambio a una tecnología con menos emisiones de carbono está agregando costos, ya que un tanquero de combustible dual cuesta aproximadamente entre un 15 y un 20% más que uno convencional.
El año pasado, se realizaron 37 pedidos de tanqueros de combustible dual de 34.000 dwt o más, lo que representó el 21% del total de las órdenes del sector y BRS Tanker anticipa que este porcentaje seguirá aumentando este año, a pesar de lo que podría ser un año de niveles extremadamente bajos en cuanto a órdenes de construcción.
Combustibles alternativos
Aunque la propulsión de combustible dual está avanzando, el camino hacia la descarbonización de la industria del transporte marítimo permanece poco claro.
Teniendo en cuenta que los tanqueros generalmente se construyen anticipando una vida útil de 2 años, las normativas del índice de Intensidad de Carbono (CII) entrantes- claves en la reducción de carbono de la OMI- eventualmente afectarán incluso a los buques de tipo ecológico. Ante esto, los armadores buscan combustibles que emitan menos o cero para sus buques.
Aunque, hoy en día, el GNL parece el mejor posicionado de los combustibles bajos en carbono para reemplazar al petróleo, su incorporación sigue paralizada por los altos precios (actualmente alrededor de US$1.800/tm en comparación con el VLSFO US$925/tm en Róterdam) y las preocupaciones que deja, debido a sus debilidades a la hora de reducir la huella de carbono. Por otra parte, todos los combustibles de carbono cero en competencia; hidrógeno verde, metanol verde, amoníaco verde, generan dudas importantes sobre su suministro final y el costo de entrega. Todo esto deja a los armadores tanqueros en el dilema de si vale la pena arriesgar un 15-20% adicional para ordenar un buque de combustible dual que eventualmente no funcionará con el combustible de carbono cero más económico y fácilmente disponible en el futuro, un factor que podría limitar su vida útil.
Ímpetu de las órdenes no crecerá
La evidencia anterior apunta a la probabilidad de que no habrá un cambio en la actividad órdenes de tanqueros hasta que se cumplan varios criterios. BRS tanker considera clave entre ellos el cambio de tendencia en el mercado de fletamento, algo que no está contemplado para este año, ya que los fundamentos de la flota permanecerán, mientras que la demanda por tanqueros no se recuperará a su nivel previo a la pandemia hasta 2023 como muy pronto.
Además, incluso si se produjera un cambio rápido en el mercado de fletamento, es posible que no haya un repunte brusco en las órdenes de construcción, considerando las opciones inciertas para tipo de combustible a futura y los altos precios.
Lo anterior sugiere que las órdenes seguirán siendo extremadamente bajas en 2022 y que puede haber un repunte a partir de 2023, suponiendo que al menos dos de los tres factores descritos (precios, incertidumbre y entorno operativo) reviertan su curso.
Teniendo en cuenta la baja lista de órdenes existente, la falta de espacios disponibles en los astilleros y la fuerte cantidad de órdenes de otros segmentos del transporte marítimo, si se produjera un repunte del mercado tanquero impulsado por la demanda en 2023, para impulsar las órdenes, debería ser sostenible hasta al menos 2026, lo que sería significativamente más largo que los recientes ciclos ascendentes del mercado tanquero de corta duración.