Se calcula que más de un buque nuevo al día han ingresado al océano desde comienzos de año.
Las primeras semanas de 2024 ya dan una idea de hacia dónde se dirige el año en lo que se refiere a la entrega de nuevo tonelaje en el segmento portacontenedor. Transcurridas poco más de tres semanas de 2024, las líneas navieras han recibido de los astilleros unos 204.000 TEUs de nueva capacidad. Se calcula que más de un buque al día se ha incorporado a la flota mundial, y eso sin considerar conros, Ro-Ros o buques multipropósito aptos para contenedores. No es sorprendente que la mayor parte de estas órdenes corresponde a MSC, que incorporó unos 72.000 TEUs o el 35,4% de toda la nueva capacidad. Le siguen Maersk Group (17,8%), Cosco Group (15,4%) y CMA CGM (13,9%), reporta Alphaliner.
Importante aumento de capacidad
Para el conjunto de este año, Alphaliner prevé un récord de unos 3,00 MTEUs de capacidad – unos 460 buques – que se incorporarán a la flota mundial. Alrededor de un tercio de esta cifra, 0,93 MTEUs y 95 buques, serán propulsados por combustibles alternativos como el GNL y el metanol. Cabe mencionar que el ingreso de capacidad de este año superará con creces los 2,35 MTEUS incorporados progresivamente en 2023.
A pesar de los temores de una vuelta a un exceso crónico de capacidad de los buques, el mercado la ha absorbido hasta ahora relativamente bien. Además han ayudado la navegación a baja velocidad, motivada por la introducción de la CII en 2023 y del régimen europeo ETS en 2024; el calado del Canal de Panamá; y los desvíos de buques desde el Mar Rojo al Cabo de Buena Esperanza.
De acuerdo con Alphaliner, una vez más, MSC “acertó en el momento oportuno” y, en la actualidad, la línea naviera recibe un buque Neopanamax tras otro, lo que le permite mantener sus servicios semanales entre Oriente y Occidente, a pesar de los tiempos de navegación más largos por la ruta del Cabo de Buena Esperanza.
No obstante, la gran cantidad de capacidad que se incorporará a la flota mundial podría causar dolores de cabeza a finales de año si los mercados de fletes se ralentizan, cesan los desvíos actuales y los buques regresan a sus rutas normales.