El proyecto presenta un avance del 35% y le apunta a estar listo en el primer trimestre del 2025.
La semana pasada los exportadores antioqueños se dieron cita en el Country Club de Medellín, en un encuentro liderado por Analdex, gremio del sector. La ocasión sirvió para dar un vistazo a la actualidad del comercio exterior colombiano y para evaluar los avances de Puerto Antioquia, obra que promete revolucionar los despachos y la recepción de mercancía no solo en este departamento, sino también para el Eje Cafetero y Cundinamarca.
Andrés Bustos, vicepresidente de asuntos institucionales de Puerto Antioquia, aseguró que ya se han desembolsado el 50% de los recursos correspondientes al proyecto, cuyas obras presentan un avance del 35%, por lo que a su juicio no hay razones para pensar que no entre en operación dentro del plazo estimado: el primer trimestre del 2025.
El proyecto, estimó, ahorraría unos US$140 millones al año a la industria colombiana en fletes y, además, la carga movilizada por Urabá pasaría de los 2,5 millones de toneladas por año actuales, a 7 o hasta 7,5 millones de toneladas durante su fase inicial. “Esperamos sumar 5 millones de toneladas más del resto del país”.
Al interior del proyecto la idea central es manejar lo que denominan “el triángulo central de Colombia”, que incluye a los tres departamentos mencionados anteriormente, los cuales representan cerca del 70% del Producto Interno Bruto (PIB) del país y para ello será clave el desarrollo de las vías que llevan hasta esta terminal portuaria.
En ese sentido, continuó Bustos, se valora que ya esté en operación la Autopista al Mar 1, mientras que Mar 2 cuenta con un avance del 97% y el megaproyecto Túnel del Toyo estaría listo en el 2025, coincidiendo con la entrada en operaciones del Puerto. De manera que Medellín estaría a 5 horas, el Eje Cafetero a 8, y Bogotá a 15, un ahorro de hasta 33% en distancias.
A pesar del panorama que dibujó, el representante del proyecto recibió las preocupaciones de los empresarios en el sentido de cuáles serán las garantías para la seguridad de las cargas, cómo se están desarrollando las zonas aledañas al Puerto y si las tarifas serán competitivas frente a otras terminales como las de Buenaventura o Cartagena.
En ese sentido, el representante de Puerto Antioquia valoró el trabajo articulado con las fuerzas armadas y auguró que progresivamente se construirán infraestructuras y comunidades aledañas al puerto, pero la prioridad es que sea un proceso escalonado y ordenado; además, exaltó que desde un principio esta obra contará con inteligencia artificial y hasta escáner para monitorear las mercancías, ahorrando así tiempo frente a las inspecciones físicas que han sido un dolor de cabeza para los empresarios.
Los alcances
Para el presidente de Analdex, Javier Díaz, Puerto Antioquia tiene posibilidades interesantes para potenciar el intercambio comercial entre el aparato productivo del país con territorios de Europa, el Caribe o la costa Oeste estadounidense. “Esto es una apuesta regional, Antioquia es el principal departamento exportador, tiene salida al Caribe y uno no piensa en Antioquia como un departamento costero, y resulta que tiene una salida natural allí y queda mucho más cerca. Es la oportunidad de aprovecharlo y ser mucho más competitivos”.
Según el líder gremial, para Puerto Antioquia se abre la puerta en materia de despachos agroindustriales, e incluso en el Paro Nacional del 2021 se vio el potencial de los puertos en esta zona del país, luego de que varias compañías reemplazaran Buenaventura por Cartagena o Santa Marta.
Además, “que este puerto le invierta desde el principio al tema tecnológico es un paso adelante”. En todo caso, sentenció Díaz, esto es un proceso y Urabá tendrá que ir creando mercado paulatinamente y el reto será trascender de ser un puerto bananero en el imaginario.
En tal sentido la confianza que se genere en las navieras tendrá un papel crucial y entre las que han depositado su voto de confianza están CMA CGM o Maersk. “Los barcos que van a llegar en el futuro una vez la infraestructura esté construida van a ser más grandes y eficientes”, apuntó Bustos.
Para Luis Fernando Posada, gerente senior de servicios logísticos de la comercializadora internacional Unibán, “Puerto Antioquia será una cadena evolutiva en la logística, porque nos tendremos que preocupar por la cadena total puerta a puerta”.
Tras cumplirse el primer año del inicio de las obras en abril pasado, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) resaltó que allí se están generando cerca de 1.000 empleos, de los cuales el 80 % corresponde a mano de obra local.
El puerto, agregó la entidad, “contará con un muelle de 91 metros de ancho por 570 metros de largo y cinco posiciones de atraque. Tendrá una profundidad de 14 metros y una capacidad para recibir buques contenedores de 367 metros de eslora”.
Cabe destacar que en 2022 las exportaciones desde Urabá sumaron cerca de US$200 millones, una cifra pequeña dentro del total nacional, pero la gran apuesta es que el puerto llegue a tener una cuota del 10% dentro de la carga que sale y entra en total en el territorio nacional.